Romanos y Visigodos

Principales Monumentos

Nos centramos en la Península Ibérica principalmente, pero sin olvidar las Islas Baleares y Ceuta, en esta última ha aparecido recientemente una interesante basílica.
De la época romana tenemos sobre todo grandes obras públicas, como el acueducto de Segovia y el puente de Alcántara. Espléndidos teatros y anfiteatros, Mérida, Cartagena, Tarragona o Itálica. Importantes villas, La Olmeda, Carranque o Sâo Cucufate.
La arquitectura visigoda es una continuación del periodo romano, pero lo conservado no ofrece una imagen fiel de cómo fue realmente aquel periodo artístico, las grandes basílicas y los edificios civiles de Toledo y otras ciudades han desaparecido. Casi todo lo que ha llegado a nuestros días se encuentra en zonas rurales aisladas. Tenemos obras públicas como el puente Pinos o las puertas de Sevilla en Córdoba. Se conservan restos de grandes villas como la de Pla de Nadal y de palacios como Recópolis y Arisgotas. Pero los monumentos más importantes que se han conservado del arte visigodo son los religiosos: San Juan de Baños, San Pedro de la Nave, Quintanilla de las Viñas, San Fructuoso de Montelios, son ejemplos significativos. Estos son algunos de los más conocidos, pero hay muchos otros que no son menos importantes. Sirvan como ejemplo los teatros romanos de Medellín y Regina o iglesias visigodas como San Vicente del Valle y Santa Lucía del Trampal.
En las últimas décadas se han producido interesantes descubrimientos que esperamos que continúen en el futuro. El arte romano está mucho más extendido y es más conocido, pero el visigodo existe únicamente en la Península y cualquier hallazgo es muy importante, tanto como impedir que desaparezcan los numerosos restos que se encuentran en estado de completo abandono.