Templos de Diana en Emérita Augusta y Ebora Liberalitas Iulia
Los dos edificios tienen numerosas coincidencias, incluso en su erróneo nombre tradicional. Hoy sabemos que estuvieron probablemente dedicados al culto imperial y no a la diosa de la caza. Otra característica poco usual en el mundo romano occidental es que son perípteros, están rodeados de columnas por todos sus lados. Fuera de Italia sólo conservamos estos dos ejemplos y el de Barcelona. El templo Maison Carrée en Nimes es del tipo pseudoperíptero, es decir, tiene columnas exentas en el pórtico y semicolumnas encastradas en el muro de la cella tanto en los laterales como en su parte trasera.
Ambos tienen seis columnas en su frente, están elevados sobre un alto podio y, rodeados de pórticos que los separaban y a la vez integraban en el foro de sus respectivas ciudades. Se han conservado gracias a su utilización durante siglos para otros cometidos.
El llamado templo de Diana en Évora, es como hemos dicho hexástilo, está rodeado de columnas por todos sus lados y se alza sobre podio de unos 3,5 metros. Conserva 14 columnas de una altura de 6,60 metros, faltando las del pronaos. Los fustes son de granito y acanalados. Los capiteles corintios y las basas áticas son de mármol de Estremoz. Construido probablemente en el siglo I d.C. fue dedicado al culto imperial. En su larga historia sobrevivió a muchas transformaciones. Fue parte del sistema defensivo del castillo de Évora, más tarde perteneció a la inquisición y luego se usó de matadero.
Formaba parte del foro romano de la ciudad. Fue recuperado en el s. XIX en una de las primeras actuaciones de la arqueología portuguesa. Las más recientes han revelado que estaba rodeado de un pórtico y un estanque. Su estructura original era similar al templo de Nimes y tenía unas dimensiones similares. El templo de Évora conserva completo el pódium, con bloques de granito regulares e irregulares. Esta base mide 15 × 25 metros, con una altura de 3,5. La escalera de acceso ha desaparecido.
El templo de Diana en Mérida es también períptero, próstilo y hexástilo. Su planta es de mayor tamaño, mide aproximadamente 40,75 x 21,90 metros. La construcción de planta rectangular se eleva sobre un podio alto de 3,23 metros de altura. Está revestido de sillares de granito, bien recortados y dispuestos a soga y tizón, rematando con una cornisa. Sobre este podio se eleva la columnata de la que conservamos poco más de la mitad. Los lados mayores tenían 11 columnas acanaladas sobre basas áticas con superficie estucada, lo mismo que los fustes. Los capiteles corintios también conservan decoración estucada. Las columnas tienen en total unos 8 metros de altura.
Fue construido probablemente en época de Augusto o Tiberio, y dedicado al culto imperial. Por ello estaba situado en el mejor emplazamiento de la ciudad, en lo que fue el foro central de Mérida, situado como es normal cerca del cruce de las dos vías principales: cardo y decumano máximos. Orientado de norte a sur, su fachada posterior sería paralela al decumano. Aunque se encontraba dentro del espacio del foro, el templo se concibió con su propio recinto ajardinado, unido al foro mediante un criptopórtico y con dos estanques frente a las fachadas laterales. Es, como en el caso anterior, similar a la Maison Carrée y a los templos dedicados a Augusto en Vienne y Barcelona. No queda ningún resto de la cubierta original del edificio por encima del arquitrabe, si bien el hallazgo de algunas piezas sueltas indica que el frontón triangular contaba con un arco de medio punto de descarga, hoy reconstruido y bien visible.Todos los elementos se ejecutaron en granito, extraído de diversas canteras próximas a la ciudad. En el interior del templo, de la cella, sólo quedan algunos basamentos internos que nos permiten entrever la división de este lugar sagrado.
El lugar fue reutilizado en época visigoda, habiéndose encontrado restos de este periodo. A finales del siglo XV se aprovechó su estructura para construir el palacio renacentista del conde de los Corbos, lo que permitió, como en el caso de su homónimo portugués, que se salvase de la destrucción total.
Sus historias paralelas, su parecido, la utilización de los mismos materiales para su construcción y su pertenencia a la misma época y estilo arquitectónico es lo que nos ha inducido a unirlos en el mismo artículo. El templo de Évora es algo posterior pero no es una copia del de Mérida, aunque la utilización de granito y formas similares en algunos aspectos pudieran deberse a grupos de constructores relacionados.
- Ubicación Google Maps del Templo Romano de Évora.
- Ubicación Google Maps del Templo Romano de Mérida.